El caso de Fofo Márquez sigue generando controversia, pues nueva información acerca de su vida actual e incluso sobre las polémicas que protagonizó en su pasado, siguen saliendo a la luz.
En esta ocasión fue la mamá de Gala Montes quien hizo fuertes declaraciones sobre la verdad de la relación que existió entre su hija y el influencer acusado de feminicidio en grado de tentativa.
Así fue la relación entre Gala Montes y Fofo Márquez
En una entrevista para TV Notas, Crista Montes se pronunció sobre la información que ha circulado sobre su hija y Fofo Márquez, contó que se conocieron desde que ambos eran unos adolescentes.
“Gala se empezó a llevar con él cuando eran chicos, cuando trabajaba en ‘El señor de los cielos’. En ese entonces él le dijo a Gala: “Quiero ser famoso”, y Gala le dijo: ‘Puedes serlo’. Lo conoció por otra influencer. El escuincle pasaba con el chofer por Gala y sus amigas”, dijo.
![Mamá de Gala Montes revela que su hija denunció a Fofo Márquez](https://cdn.revistafama.com/uploads/media/2025/02/11/mama-gala-montes-revela-hija-1_thumb_606_352.jpg)
De acuerdo a las palabras de Crista, ambos se reunían como amigos, esporádicamente: “Cuando Gala tenía 15 años convivió con él como 6 meses. Luego lo dejó de ver. A los 17 él fue al cumpleaños de Gala a la casa. Los estuve observando (...) Fuimos a un antro a Polanco con todas las chavillas. Esa vez fui con ellos. Nos regresó a la casa. Después nos llevó a cenar a ‘La casa de Toño’. Él les pagó a todas las escuinclas”, mencionó.
Fofo Márquez habría amenazado a Gala Montes
En la charla, aseguró que muy diferente a lo que se especula, la relación entre ambos fue muy mala, pues incluso Gala denunció al creador de contenido, ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNART). Esto debido a que Márquez presumía tener múltiples animales exóticos que presuntamente eran ilegales.
“Fofo le habló a Gala para amenazarla de muerte por lo que había hecho. Me dio miedo, porque le dijo: ‘Soy un chavo con mucho poder. No sabes lo que estás haciendo, Gala’. Ahí sí le hablé al escuincle y le dije que no tenía por qué amenazarla. También llamé al papá, y su respuesta fue: ‘Yo no me meto. Yo respeto mucho lo que hace mi hijo’. El papá vivía en su mundo, no le ponía atención al muchacho ni límites”, aseveró.
Además confesó que desde ese momento vio un comportamiento errático por parte del joven: “Es un chavillo pesadón. No es agradable. Todos lo tomaban como el niño rico de: ‘A ver qué le sacamos’ o porque tiene una alberca, vamos a hacer una fiesta, pero al final del día, aunque tenía dinero, pues caía gordo. De repente daba pena”, sentenció.