Alfredo Adame es uno de los personajes más polémicos del mundo del espectáculo, por lo que constantemente está en el ojo del huracán. Recientemente, el presentador de televisión y ex participante de La Casa de los Famosos de Telemundo, pasó seis horas en El Torito.
El famoso ingresó al Centro de Sanciones Administrativas y de Integración Social el pasado 14 de junio de 2024, luego de ofender a Gustavo Adolfo Infante y a su mamá. A través de su cuenta de Instagram, el famoso se grabó desde su automóvil feliz por ingresar a El Torito por seis horas.
“Seis horas de arresto por mentársela a un periodista, salgo a la una de la tarde”, escribió Alfredo Adame en su cuenta de Instagram, dirigiéndose a El Torito por el pleito que enfrenta con Gustavo Adolfo Infante. De hecho, el comunicador mexicano, también informó en Sale el Sol que el polémico presentador fue arrestado por insultarlo.
Alfredo Adame salió de El Torito y confesó que convivió con sus fans adentro
Luego de cumplir las horas establecidas, Alfredo Adame fue captado saliendo de El Torito con una sonrisa de oreja a oreja. El ex conductor de 'Hoy' llevaba puesta una camiseta anaranjada, por lo que inmediatamente llamó la atención de la prensa y de decenas de reporteros que lo estaban esperando.
"Fue una medida de arresto de tres horas por el asunto, este que traigo con una persona. Aparentemente, infringí una medida cautelar", dijo Alfredo Adame, quien al parecer tiene prohibido hablar públicamente de Gustavo Adolfo Infante y su madre, los implicados en la polémica.
Alfredo Adame también fue cuestionado sobre su estadía, revelando que se la pasó "padre" y que estuvo conviviendo con varios presos. Según el ganador de 'Soy Famoso, Sácame de Aquí', escuchó algunas conferencias y convivió con sus fanáticos adentro de El Torito.
"Me la pasé padre, todo muy bien, hay conferencias cada media hora y me trataron muy bien. Son mis fans los que están adentro, me súper saludaron, cotorrearon conmigo. Les estuve contando de la televisión y muchas otras cosas", concluyó el famoso, quien luego se marchó despreocupadamente a su casa.
