La felicidad es una de las emociones más deseadas que se produce una vez que llega algo a nuestras vidas que nos otorga una sensación de bienestar y se consiguen determinados objetivos que hacen a una persona sentirse bien con lo que se desea ser; sin embargo, cada una de las personas le da un significado muy diferente a la felicidad.
A pesar de ello, no se puede medir el nivel de felicidad que una persona tiene, aunque cualquiera puede determinar si se es o no feliz haciéndose algunas preguntas que ayudan a mejorar el autoconocimiento, sin importar el significado que se le de a la misma y aunque algunas personas creen que lo material es lo que determina el estado de ánimo, la realidad es que esto va más allá, pues se debe concientizar sobre lo que se siente al estar únicamente rodeados de nuestra propia mente.
Tu ¿eres feliz? Descúbrelo con estas sencillas preguntas.
Instrucciones
Anota las respuestas en una hoja de papel, aplicación de tu celular o el lugar donde más prefieras; de lo contrario las puedes memorizar, pues al final deberás sumar los puntos obtenidos. Todas las preguntas se responden con ‘Si’ o ‘No’, por lo que cada que la respuesta sea positiva, deberás agregar 10 puntos a la lista y cuando esta sea negativa agregarás únicamente 5 puntos.
Si estás listo o lista para comenzar, pon atención a las siguientes preguntas:
1. ¿Acostumbro a pensar cosas positivas?
Marca 10 puntos si piensas que evitas tener pensamientos constantes negativos sobre lo que ocurre en tu vida y normalmente no te quejas de lo que tienes, o 10 en caso de que no sea así.
2. ¿Me encuentro satisfecho con lo que soy?
Lo más probable es que estés feliz con lo que tienes en la vida. No significa querer cambiar para mejorar, pero tampoco basas tu estado de ánimo en lo que sientes sobre tu situación actual de vida.
3. ¿Me rodeo de personas que me apoyan?
El apoyo en los que nos rodean suele ser una de las cosas más importantes, pues el rodearse de un ambiente tóxico puede provocar malestar, sobre todo cuando se trata del lugar en el que vives o las relaciones en las que te desenvuelves.
4. No le doy mucha fuerza sobre mi estado de ánimo a lo que no poseo
El vivir en el presente es una de las cosas que más importan a la hora de pensar en nuestra felicidad. Pensar en el pasado puede generar una sensación de nostalgia y depresión y por otra parte, pensar en el futuro y lo que queremos obtener puede generar ansiedad; aunque también pueden fusionarse las dos al mismo tiempo.
5. ¿Volvería a escogerme a mí para volver a nacer?
En el caso de que esto se pudiera, el estar seguro sobre si se volvería hacer, podría ser un aspecto muy importante a la hora de cuestionarnos sobre nuestra felicidad.
6. ¿Disfruto de los pequeños detalles de la vida?
Apreciar las cosas a las que no muchos le toman importancia, es algo que podría ayudar a la hora de descubrirnos, pues los pequeños placeres de la vida son los que ayudan en muchas ocasiones a mantenerse enfocados en el ahora.
7. ¿Evito conflictos con las personas cercanas a mí?
La relación que se tiene con otros es una señal de la forma en la que nos encontramos con nosotros mismos.
8. ¿Sonrío naturalmente y sin esfuerzo?
Sonreír no representa algo falso en tu vida o no lo utilizas como una forma de ocultar una emoción que no quieres dar a conocer.
9. Me gusta mi vida y no quisiera cambiarla
Estar conforme no significa no cambiar la forma en la que vemos el futuro, pues aunque debemos enfocarnos en lo que tenemos en el presente, también se debe trabajar en lo que se desea obtener.
10. El ambiente en el que me desenvuelvo ¿es tranquilo?
El vivir fuera de estrés es algo que se debe analizar, pues en algunas ocasiones la vida diaria en la actualidad pueden bloquear el conocimiento de nuestros sentimientos, por lo que se debe ser consciente de lo que pensamos y sentimos.
Suma los puntos y si estos dan un resultado de 100, lo más probable es que te encuentres muy bien mentalmente y debas continuar de esa manera. Por otra parte, si el resultado es de 50, debes comenzar a considerar buscar ayuda profesional para trabajar en lo que te hace feliz.
Si tu caso es un intermedio, la realidad es que no está del todo mal, pues es muy complicado llegar a este punto, pero se debe trabajar para llegar lo más alto posible y comenzar a darle un nuevo significado a lo que se siente y se hace.