Los puntos negros son un problema muy común, especialmente en personas con piel con tendencia a ser grasa o a producir exceso de sebo durante el día, estos pequeños poros tapados se oxidan generando una coloración oscura en la piel, aunque su tamaño es muy pequeño, usualmente es toda la zona la que se ve afectada, pueden aparecer en la nariz, barbilla e incluso en la frente, son uno de los problemas en la piel más complicados de combatir, se requiere mucha paciencia pues se forman a partir de la acumulación de sebo, esto quiere decir que tenemos que balancear nuestra piel para que no produzca grasa en exceso, esto se logra con una rutina especifica y con ayuda de mascarillas naturales.
Lo primero que debes saber para eliminar tus puntos negros, es que la limpieza facial es muy importante, lavar tu rostro al menos dos veces al día es importante, pero debes asegurarte no hacerlo con un jabón que reseque tu piel, masajea la zona con la espuma del jabón durante al menos 1 minuto, esto hará que poco a poco se limpie el área, otro punto importante es que la falta de hidratación en la piel es justamente lo que ocasiona que se produzca exceso de sebo, por ello es importante que mantengas hidratada tu piel.
Mascarillas para combatir los puntos negros
Mascarilla de gelatina y clara de huevo
Esta mascarilla es similar a las populares ‘peel-off’ que hay a la venta, pero es mucho más amigable con el rostro, además provee hidratación y colágeno a la piel, se puede aplicar una vez a la semana, el tiempo de uso debe espaciarse para no dañar la barrera natural de nuestra piel y es mejor solo aplicarla en la parte afectada, evitando zonas como el contorno de ojos.
Ingredientes:
1 cucharada de grenetina natural en polvo
3 cucharadas de agua caliente
1 clara de huevo
Se deberá mezclar el agua con la grenetina hasta disolver por completo, si el agua no es suficiente, agrega más poco a poco, debe quedar un poco líquida pero no al punto de no mantenerse pegada, cuando esté tibia agrega la clara de huevo y mezcla, aplica una capa ligera en las zonas y espera hasta que esté seca para retirarla con las manos, lava bien la zona con agua luego de retirarla.
Mascarilla de arcilla con vinagre
Esta mascarilla requiere un ingrediente poco común pero muy efectivo, es muy fácil de conseguir, en tiendas naturistas está a la venta a un precio económico, su efecto drena el sebo en cuanto se seca, absorbe la grasa de la zona y si se aplica con regularidad puede dar resultados impresionantes.
Ingredientes:
1 cucharada de arcilla en polvo
2 cucharadas de vinagre blanco de manzana
Mezcla los ingredientes hasta obtener una pasta manejable, debe quedar un tanto líquida para poder aplicarla en el rostro, pero lo suficientemente sólida como para que no se escurra en el rostro, aplícala en la zona deseada y retírala con agua tibia en cuanto esté completamente seca, hidrata la zona luego de lavar.
Mascarilla de avena y chayote
Esta mascarilla es una opción muy buena para reemplazar la arcilla, el chayote absorbe la grasa y la avena provee hidratación, tiene un efecto similar, pero recuerda que solo debes aplicarla una vez por semana para evitar dañar tu piel.
Ingredientes:
2 cucharadas de avena molida
1 cucharada de leche entera
1 cucharada se chayote molido crudo
Mezcla los ingredientes hasta tener una pasta manejable, aplícala en las zonas problemáticas y deja reposar 15 minutos, retira con agua tibia y lava bien tu rostro, no olvides aplicar hidratante para evitar que tu piel se reseque.
