Los exfoliantes son productos cosméticos que sirven para limpiar y eliminar impurezas, en el caso del rostro es recomendable usar a partir de la adolescencia cuando el cutis produce más cantidad de sustancias que desencadenan el acné; sin embargo, en la vida adulta son de igual importancia por su acción renovadora y estimulante que ayudan a mantener un aspecto fresco, saludable y juvenil por más tiempo.
Los beneficios de la exfoliación son muchos, pero entre los que más se pueden destacar son los siguientes:
Eliminación de células muertas: Estas producen un aspecto y textura irregular en nuestro cutis, por lo que al ser retiradas con la exfoliación dejan al instante la piel más suave y luminosa.
Limpieza de poros: La exfoliación dará beneficio extra a las pieles grasas, pues ayuda a retirar el sebo de la piel que obstruye los poros y causa puntos negros.
Activan la circulación sanguínea: Los masajes con los que se realiza la exfoliación estimulan la correcta circulación sanguínea, lo que da al rostro un aspecto resplandeciente y saludable.
Intensifican los beneficios de otros tratamientos: Al tener tu piel limpia y libre de impurezas permites que los activos de cualquier crema o sustancia que apliques tengan mayor penetración y capacidad de acción.
Antes de probar un exfoliante debes de saber cuál es tu tipo de piel, debido a que los componentes podrían afectar en vez de beneficiar, por ejemplo, si sufres de cutis graso lo recomendable es utilizar uno suave y evitar alguno con sustancias abrasivas.
¿Cada cuánto tiempo?
La piel seca y normal puede ser exfoliada una o dos veces por semana, mientras que las pieles sensibles pueden ser sometidas al procedimiento cada 9-10 días; sin embargo, hay que recordar que cada persona tendrá una reacción diferente y deberás de estar atenta a la reacción.
Existen pieles extremadamente finas o delicadas en las cuales lo mejor será esperar cada quince días.
Precauciones
Existen exfoliantes que contienen partículas con bordes afilados que crean rasguños microscópicos en la piel, por lo que se debe de tener especial cuidado. Consulta a tu dermatólogo.
