Vicente Fernández formó una de las familias más famosas de la farándula, no solo en México, pues en otras partes del mundo se sabe sobre la Dinastía Fernández, pues aunque no todos continuaron el camino de la música, todos o la mayoría de los integrantes suelen ser muy abiertos para hablar con la prensa y los fans, pero también hay quienes cuidaron al máximo su privacidad como las hermanas del Charro de Huentitán.
La Dinastía Fernández comenzó en 1963 cuando el cantante se casó con María del Refugio Abarca Villaseñor, conocida como doña Cuquita. A partir de ese momento comenzó a formarse la familia conformada por cuatro hijos, algunos de ellos siguieron la tradición del canto y otros prefirieron mantenerse al margen, pero todos son muy conocidos por la cercanía con su padre y sus apariciones públicas.
Pero antes de que Vicente Fernández y su familia fueran una de las dinastías más influyentes de México, el Charro de Huentitán vivió grandes momentos junto a la familia que lo vio crecer que estuvo conformada por sus padres, Ramón Fernández Barba y María Paula Gómez Ponce, pero también dos hermanas, María del Refugio y Teresa.
En la biografía no autorizada de Vicente Fernández Olga Wornat asegura que los padres del famoso se mudaron a finales de la década de los 30 de Tepatitlán a Huentitán, un pueblito situado en la periferia de la Zona Metropolitana de Guadalajara y ahí criaron a sus tres hijos.
La escritora detalló que Vicente Fernández al ser el único varón se convirtió en el consentido de sus padres, pero también de sus hermanas, quienes desde pequeñas fueron muy unidas a él y fue a quienes el cantante le contó sus sueños que se cumplieron con el paso de los años.
En la biografía se cuenta que Vicente Fernández solía jugar con plastilina y construía ranchos con toda clase de animales y le decía a sus hermanas que un día iba a tener un “rancho así de grande” y así lo consiguió gracias a las ganancias que su trabajo artístico y negocios le dejaron.
En el programa De primera mano, Vicente Fernández confesó que sí hubo peleas entre hermanos cuando eran pequeños, pero su madre, quien murió a los 47 años a causa de cáncer, recurrió a un método extremo para evitar las riñas, pues si los veía en conflicto, untaba manteca de cerdeo en la espalda de uno y el otro tenía que pasarle la lengua.
Las hermanas de Vicente Fernández lograron seguir siendo muy unidas al cantante, de hecho hay muchos integrantes de la familia que confirman que solían reunirse, sobre todo en fechas especiales como Navidad y cumpleaños, pero siempre lograron pasar desapercibidas ante la prensa, así que no se sabe exactamente cómo es su vida actual ni a qué se dedican.