Tabata Jalil es una de las conductoras de la televisión que se ha convertido en una de las más queridas por el público, tanto así que incluso contó que ha tenido a un acosador que incluso le escribía cartas un tanto extrañas.
Fue en el pódcast de ‘La Cotorrisa’ donde la conductora de Venga la Alegría contó sobre las experiencias que ha tenido con algunos fans, pues si bien la mayoría han sido buenas, otras más han sido un poco incómodas.
Tal fue el caso de un fan que se aparecía en cada una de las grabaciones que hacía, así como también le enviaba regalos, la esperaba afuera del set e incluso le escribió cartas, con lo que ella piensa puede ser sangre.
“Cartas escritas con sangre. Super loquito el asunto, aparte era un chavo como muy Stalker. Si tu subías como una historia de donde ibas a estar, pues él se aparecía, aparecía así como undergound, se te quedaba viendo. Terrible, terrible”, mencionó la conductora del matutino.
Tabata Jalil confesó que incluso en Tv Azteca tuvieron que ponerle una restricción para que no pudiera entregarle paquetes o que se apareciera ahí, pues llegó a tal punto que la conductora llegó a temer por su integridad.
“Sí tuvimos que ponerle un alto, porque aparte mandaba cajas enteras con regalos y con sus cartas escritas en sangre. Le pegaba monedas y ‘tu y yo’. ¿Cómo sabíamos que era sangre? Porque literal se veía que era sangre. Terrible”, confesó Tabata Jalil.
Tabata Jalil contó que en las cartas el acosador le escribía que la amaba mucho y que probablemente habían sido algo en otra vida, así como también le deseo la muerte porque nunca le respondía sus gestos.
“Que me amaba mucho, que éramos algo en otra vida y que ¿Por qué lo despreciaba? Que me iba a morir entonces yo decía. ‘Esto está un poco Heavy’. Mandaba cajas con perfumes, bolsas, un chorro de cosas nuevas”, reveló Tabata Jalil.
La conductora regalaba entre sus compañeros los obsequios que le llegaban, pues no quería llevarse esa mala vibra a casa, incluso en TV Azteca le prohibieron ingresar o dejar algún paquete y cuando se aparecía en las grabaciones, sus compañeros lo grababan para tener evidencia en caso de que algo le pasara a la conductora.
“De terror, regalaba las cosas ahí en la oficina. Duró como unos 9 meses, tuvimos que acudir a la policía cibernética, dar las redes del humano que me estaba acosando y en Azteca tuvimos que poner restricciones”, mencionó.
