Sara García es conocida, de forma cariñosa, como la abuelita de México esto debido a los muchos papeles que tuvo en su carrera como actriz y comediante dando vida personajes de la tercera edad, tenía un rostro que se destacaba por ser extremadamente tierno sin importar el paso del tiempo, por lo qué desde los 45 años de edad inició tomando papeles de mujeres adultas mayores, por lo que pronto siguió obteniendo más y más roles como abuela.
Ella es originaria de Orizaba Veracruz e hizo su debut en 1917 se le invitó a participar en una película llamada ‘En defensa propia’ y poco a poco fue ganando reconocimiento debido a su talento natural, tenía una adicción que la hacía destacar de entre otras famosas y además su voz tenía un tono pujante que le hizo ser reconocida y admirada por el público, por ello su participación en el cine fue aumentando trabajando junto a Vicente Fernández, Pedro Infante e incluso Cantinflas.
Debido a que comenzó a caracterizarse de abuela desde que era todavía muy joven, pocas personas realmente saben cómo se veía Sara García antes de ello, su popularidad como abuela es tal que hoy en día sigue siendo la imagen del Chocolate Abuelita, pero en realidad era una mujer de características físicas muy elegantes y que se consideraban bellas, a pesar de no tener la figura extremadamente delgada y curvilínea de otras famosas, la razón por la que debutó en pantalla fue precisamente por su gran atractivo físico. 
Tenía cabello rizado y abundante, cejas igualmente marcadas, ojos almendrados y bastante pequeños, su nariz de la recta y sus labios delgados, esta última característica fue lo que la hizo comenzar actuar como mujer de la tercera edad, era tan buena como actriz que pocas personas realmente se daban cuenta que en realidad no era una anciana, más adelante gracias a que construyó una carrera alrededor de personajes mayores, no importando el paso del tiempo siguió interpretándolos hasta convertirse en un icono en México.
