Salma Hayek conquistó este año una vez más la industria del cine, pues la actriz fue reconocida en el Festival del Cannes a mitad de año, asimismo se convirtió en una superheroína de Marvel al interpretar a Ajak en la película Eternalsa la cual le ha ido muy bien en taquillas, también formó parte de la esperada película House Of Gucci que está próxima a estrenarse y por si fuera poco el día de ayer develó su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
En la ceremonia la mexicana estuvo acompañada no solo por sus cientos de fanáticos, sino también por su esposo François-Henri Pinault, sus padres, así como su hermano, esposa y la hija de la actriz, Valentina Paloma Pinault. Entre los invitados también estuvo el actor Adam Sandler con quien compartió pantalla en películas como “Son como niños” y la directora de cine Chloe Zhao quien fue la encargada de convertirla en superheroína.
En el discurso que ofreció la nominada al Oscar recordó como fueron sus primeros años en Hollywood, pues no fueron nada fáciles e incluso algunos directores le decían que regresara a hacer telenovelas, pues nunca iba a triunfar.
“Pasaba por aquí y pensaba... '¿Qué hago aquí? Nadie me quiere aquí'. Me decían. ''Mexicana regresa a tu país'. Recuerdo al estudio decirme: '¿Por qué no haces telenovelas? Jamás encontrarás trabajo aquí' Y dije: 'Nadie me quiere aquí'', pero me quedé" Dijo conmovida la actriz.
Valentina Pinault se roba la noche en minivestido negro
Como es costumbre la mexicana lució espectacular en un vestido negro con escote de corazón y detalles en color plata que le dieron un porte regio y la hicieron lucir elegante, sin embargo, fue su hija Valentina de 14 años de edad quien se llevó la noche, pues lució un minivestido también en color negro con detalles de felpa tanto en la parte superior como inferior acompañada de unas botas negras y un saco en el mismo tono los que le valieron para robarle un poco de reflectores a su mamá en su gran noche.
