Salma Hayek no ha parado de presentarse en eventos públicos y programas de televisión como parte de la gira promocional de House of Gucci y Eternals, la cinta de Marvel en la que debutó como heroína, pero en esta ocasión se tomó un momento para hablar de unza experiencia personal, pues asegura que en su residencia pasan cosas paranormales y que su hija ha sido testigo.
Para promocionar Eternals, la película en la que Salma Hayek interpreta a Ajax y comparte créditos con Angelina Jolie, la mexicana acudió al programa de Ellen DeGeneres, pero la conversación se desvió y terminó relatando algunos sucesos extraños que han ocurrido en su residencia.
Todo comenzó cuando Ellen le preguntó a Salma Hayek si había sido testigo de alguna experiencia con fantasmas en la mansión de Londres, en donde vive actualmente con su esposo y su hija Valentina Paloma y sorprendió a todos al responder afirmativamente.
“La casa no está embrujada como antes, pero pasan cosas e incluso un guardaespaldas ya no quiso trabajar ahí, debido a lo que hemos vivido sin aparente explicación alguna”, aseguró la actriz nominada al Oscar.
Ante la inesperada respuesta de Salma Hayek, Ellen DeGeneres continuó preguntando sobre lo que ha visto en su residencia y la actriz insistió en que pasan cosas raras, como las luces que se prenden y apagan solas, puertas y ventanas que se abren y cierran sin que haya alguna corriente de aire y un piano que se toca solo, incluso, la famosa bromeó diciendo que no interpretan una buena melodía, sino que “parece que están borrachos”.
Las declaraciones de Salma Hayek sobre los sucesos paranormales que ocurren en su casa no terminaron aquí, pues dijo que su hija de 14 años también es testigo de lo que ocurre y en ese momento le cedieron la palabra a Valentina Paloma para que relatara su experiencia.
“He visto cosas reales y lo peor que me ha tocado es que a los fantasmas dos veces”, dijo la joven al público y Salma Hayek continuó diciendo que su esposo, François-Henri Pinault, es el único que se mantiene escéptico e incluso trata de convencerlas de que todo es producto de su imaginación; sin embargo, la protagonista de Frida confesó que la situación en casa llegó a ser tan extrema que llamó a un médium para expulsar a las presencias de su casa.
Según la actriz, cuando contrató a esta persona, le advirtió que no quería que llevara a la casa nada que tuviera que ver con sacrificios de animales, así que la mujer acudió al domicilio para ver lo que ocurría y les dijo que varios de los fantasmas que estaban en el sitio se fueron, pero que hubo dos que se resistieron a hacerlo.
“Comenzó a recorrer la habitación y dijo: ‘Hay una anciana aquí, y un niño’. Siguió diciendo más cosas y todo el mundo se asustó aún más, fue peor, encontró como veinte o diez, y lo peor es que en un momento dado Valentina le preguntó si el fantasma se había ido, porque ese estaba cerca de su habitación, y le dijo que no y que era una monja”, ha explicado en el programa de Ellen DeGeneres.
