Penélope Cruz es una reconocida actriz española, que se ha dado a conocer tanto por producciones españolas como internacionales, colaborando con directores de renombre como Pedro Almodóvar, Woody Allen y Ridley Scott.
Hace unos años reveló que sufría de una grave fobia, es decir, el temor fuerte e irracional de algo que representa poco o ningún riesgo. La actriz confesó vivir con amaxofobia, el temor extremo e irracional a conducir, pero ¿De qué se trata?
¿Qué es la amaxofobia?
La amaxofobia es el pánico a conducir, que puede afectar seriamente la vida cotidiana de quienes la sufren, restringiendo su movilidad, reduciendo su participación en actividades sociales y dificultando que lleven una vida normal y activa.
La razón de que la actriz lo padezca viene de un grave suceso que más tarde se convirtió en un trauma de por vida para ella. Y es que Penélope vio cómo atropellaban a su hermana Mónica.
“La atropelló un coche delante de mí cuando yo tenía ocho o nueve años. Recuerdo que llevaba un abrigo rojo. ¡Hablando de rojo!”, reveló la actriz en una entrevista de 2023, cuando estrenaba la película en la que participó, Ferrari.
La artista española confesó que desde aquel momento nunca pudo manejar un automóvil: “El tiempo se detuvo en ese instante. Es un gran trauma, la vi perder el conocimiento. Estaba paralizada en el hospital”, añadió.
Síntomas de la amaxofobia
Los síntomas físicos de la amaxofobia son variados y dependen de la reacción de cada persona, sin embargo, entre los más comunes se encuentran: la transpiración por el nerviosismo, el aumento de la frecuencia cardíaca y mareos, los cuales pueden derivar en un ataque de pánico.
Desde el punto de vista psicológico, la ansiedad por desempeñar esta fobia, puede manifestarse en insomnio, pesadillas y pensamientos negativos sobre sucesos relacionados con la conducción de un automóvil.
Causas de la amaxofobia
Las causas exactas de la amaxofobia pueden variar de una persona a otra, sin embargo, como lo es el caso de Penélope Cruz, pueden ser derivados de un trauma. Aunque también pueden incluir factores genéticos, psicológicos y ambientales.
Tratamiento para la amaxofobia
El tratamiento de la amaxofobia generalmente implica una combinación de terapia cognitivo-conductual, que ayuda a las personas a identificar los pensamientos negativos que los unen con la fobia. La terapia de exposición, que tiene como objetivo exponer a los individuos a situaciones con su trauma para ayudarlos a superar sus miedos. Y finalmente técnicas de relajación, que ayudará a desarrollar habilidades para enfrentar el miedo y la ansiedad asociados.
