Héctor Parra el día de ayer dio a conocer una carta en la cual habla por primera vez sobre la situación que está viviendo con su hija Alexa Parra, pues mantiene que es víctima de su madre, Ginny Hoffman, quien asevera la ha estado manipulando.
“He negado y me mantengo negando rotunda y categóricamente las falsas acusaciones que mi propia hija, obviamente manipulada, entrenada y amenazada, se ha prestado a una complicidad tan vil, lo cual lamento con profundo dolor y más por ella que por mí. Que fuerte reconocer que mi hija sí es víctima, pero no de su propio padre como lo quieren hacer parecer”, dice el histrión en la carta compartida por su hija, Daniela Parra.
Maryfer Centeno analiza la carta enviada por Héctor Parra
La grafóloga, Maryfer Centeno, en un vídeo compartido en sus redes sociales compartió el análisis de la carta que envió el histrión, hoy condenado a 10 años, 6 meses en prisión por el delito de corrupción de menores.
En este análisis, la experta explicó que el actor busca objetividad en este primer encuentro que tiene de manera más directa con la opinión pública.
"Quiero que vean cómo es la escritura, la dimensión de mayúsculas y minúsculas es perfecta, lo cual nos habla de una persona que está buscando ser objetiva; la letra es redondeada, es una letra curva, lo cual refleja amabilidad, es una persona de trato sumamente cortés", mencionó en el programa ‘De primera mano’.
La experta explicó además que la escritura de Héctor Parra es vertical debido a su terquedad; sin embargo, en la carta esta se inclina hacia la izquierda, pues está ‘enganchado al pasado’, asimismo, dijo que la letra del histrión también tiende a ir hacia ‘abajo, lo cual nos habla de una persona que está deprimida’, mencionó.
“Cuando pone las palabras ‘La verdad’ lo pone muy fuerte, lo cual remarca mucho, porque él está convencido de que está diciendo la verdad. Cuando pone ‘Mi propia hija’ no hay angulosidades, por lo cual no parece estar enojado con la hija que lo acusa”, menciona Maryfer Centeno.
"Está muy molesto y convencido que la madre es una persona inhumana y que no tiene escrúpulos, de eso está convencido. La firma es al centro, lo que nos dice que está viviendo el presente, el aquí y el ahora”, menciona MaryFer Centeno.
