Juan Gabriel fue y sigue siendo considerado como uno de los iconos de la música regional mexicana del último tercio del siglo XX, pues talento como cantante, compositor y cantautor traspasó barreras, incluso muchas de sus composiciones han sido traducidas a idiomas como inglés, alemán, francés, japonés, griego y hasta turco, entre mucho más, pero hay una canción que puso en el ojo público un lugar de Tijuana, se trata del salón Noa Noa.
En 1980, Juan Gabriel incluyó en el álbum Recuerdos el sencillo “Noa, Noa”, una canción que fue tan bien recibida por el público que varios artistas la grabaron, como la cantante española Massiel, quien hizo una adaptación y se convirtió en una de las más populares de la intérprete madrileña, Pandora también la incluyó en su LP Con amor eterno, Lucía Méndez y ha sido cantada infinidad de veces por el público y en homenajes al Divo de Juárez, pero, ¿sabes en qué se inspiró el artista para la composición de esta canción?
Resulta que entre los versos de la canción se describen las noches de un salón de baile en el que Juan Gabriel comenzó su carrera artística, ahí fue en donde cantó por primera vez cuando tenía 16 años y se presentaba como Adán Luna. Está ubicado en Tijuana a escasas del puente fronterizo Santa Fe que conduce a la localidad estadunidense de El Paso.
Mercedes Álvarez, conocida solo como Meche, fue quien metió a Alberto Aguilera Valadez de contrabando al lugar, sabía que eso podría traer problemas al salón, incluso podría valer el cierre, pero decidió hacerlo para que la gente escuchara su voz.
Ese recinto abrió sus puertas en 1964 y tuvo gran éxito debido a que grupos locales se presentaban para deleitar al público. Según David Bencomo, hijo del propietario en ese entonces la ciudad de llenó de soldados, pues los que estaban inmersos en la guerra de Vietnam estaban cerca de la ciudad y no escatimaban en gastos, pues no escatimaban en gastos debido a que no tenían la certeza de que pudieran volver, así lo dijo en entrevista para la agencia EFE.
Debido a la fama del nombre,la familia del difunto Juan Gabriel comenzó una batalla legal por el sitio; sin embargo, el propietario siempre ha dicho que tiene papeles que comprueban que ellos no tienen ningún derecho.
Así recuerdan a Juan Gabriel, las personas que convivieron con él cuando comenzó a presentarse en el Noa Noa.