La famosa cantante Gloria Trevi y su esposo, Armando Gómez, están a punto de celebrar 14 años de matrimonio, con una historia de amor que comenzó de manera inesperada mientras ella enfrentaba un juicio en prisión.
Armando Gómez, un abogado de profesión, desempeñó un papel clave en la vida de Gloria Trevi mientras ella estuvo recluida en Chihuahua, pues se convirtió en el defensor de Gloria Trevi durante un momento crucial en su vida.
En agosto de 2005, la pareja dio la bienvenida a su hijo Miguel Armando en McAllen, Texas, marcando un nuevo capítulo en su vida juntos. Cuatro años después, en 2009, decidieron formalizar su relación mediante un matrimonio civil en octubre y una ceremonia religiosa en diciembre. La boda tuvo lugar en la majestuosa Catedral Metropolitana de Monterrey, Nuevo León.
Pero la historia de Armando Gómez va más allá de ser el esposo de Gloria Trevi. Además de su papel en la vida personal de la cantante, Armando Gómez también se ha convertido en su representante y es un empresario activo en la industria del entretenimiento.
¿Cómo se conocieron Armando Gómez y Gloria Trevi?
Sin embargo, lo que hace que esta historia de amor sea aún más fascinante es cómo se conocieron. Gloria Trevi reveló en su bioserie, producida por Karla Estrada, que su mamá le pidió que escribiera una canción para Armando. El destino intervino cuando él la visitó en el reclusorio en Chihuahua, un encuentro casual que cambió sus vidas.
Tras varios meses de encuentros frecuentes, Gloria confesó que comenzó a enamorarse de él, incluso coqueteando en una ocasión, algo que nunca había hecho antes.
"Me dijo: 'Te veías muy bonita', y yo ya en perra... nunca jamás en mi vida había coqueteado. Le dije: 'Esto me dices porque estás hablando por teléfono, pero no me lo dirías en persona'. No yo me sentí la más zorra del planeta y el próximo domingo viene y me dice: 'Te ves bien bonita'", recordó la cantante.
Armando Gómez, por su parte, deseaba una relación más seria desde el principio, pero Gloria Trevi le pidió que lo pensara debido a la atención de los medios que rodeaba sus vidas.
Tras una semana de reflexión, antes del 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes, Armando le pidió a Gloria que fuera su novia, marcando así el inicio de una relación que ha resistido las adversidades y perdura hasta el día de hoy.