Federica Quijano ha sido una inspiración para las millones de mamás mexicanas que tienen un hijo autista. Y es que, su hijo Sebastián, fue diagnosticado con autismo desde los tres años de edad. Desde ese momento, la intérprete de 'La Calle de las Sirenas' ha pasado por varios momentos de frustración y tristeza.
Federica Quijano ha expresado que Sebastián tenía comportamientos muy extraños desde pequeño, como por ejemplo, golpear personas, intentar saltar por las ventanas y hasta autolesionarse. Por lo anterior, la cantante tuvo que internar al menor varias veces en un hospital psiquiátrico, cosa que la llevó a la depresión.
En una antigua entrevista con Gustavo Adolfo Infante, la intérprete contó que "es el dolor más grande que puedes tener como mamá" al ver a un hijo con un padecimiento y tener que internarlo: “Estuvo un tiempo nada más porque empezó a lastimarse él, y no había manera de controlarlo. Yo lo agarraba y (le decía): ‘Mi amor, no te pegues. ¿Qué te está pasando?’. Fue una cosa que no estás preparada para ver como mamá”.
Federica Quijano y el día que fue golpeada por su propio hijo autista
En una entrevista antigua con Pati Chapoy, Federica Quijano expresó que Sebastián pega, rasguña, muerde y hasta pellizca, por lo que ha tenido que ser atendido y medicado varias veces. También contó que el menor tiene memoria a corto plazo, pues incluso llega a olvidar personas y nombres.
Las cosas se complicaron en enero de 2024, cuando Federica Quijano llegó hasta el hospital por un cabezazo de su hijo Sebastián en el brazo. Según la cantante, el menor se puso muy "agresivo" y tuvo que ser atendida de emergencia tras un problema de tendinitis.
Afortunadamente, la famosa se repuso por un tratamiento de antiinflamatorios, vitaminas y reposo, pero su hijo Sebastián no ha mejorado. Y es que, en diferentes videos de su cuenta de Instagram, la cantante ha confesado que tiene miedo de que el niño crezca y le pegue más fuerte debido a su fuerza.
“Seguirán viniendo días así, complicados. Lo único que me da más miedo es que él sigue creciendo, haciéndose más fuerte, y yo más viejita. Me asusta el día que ya no pueda con él. Entiendo que tiene una discapacidad, pero aunque sé que tiene esa discapacidad, no deja de dolerme y de responder de una manera humana", declaró en su cuenta de Instagram.
