La artrosis mandibular es una enfermedad degenerativa que afecta las articulaciones temporomandibulares (ATM), las cuales conectan la mandíbula con el cráneo. Esta condición provoca un desgaste progresivo del cartílago que protege estas articulaciones, causando dolor, rigidez y problemas funcionales como dificultad para masticar o abrir la boca.
En casos avanzados, la artrosis mandibular puede llevar al deterioro del hueso maxilar, lo que compromete la estabilidad de los dientes y podría derivar en su pérdida, un escenario que, según varios rumores, parece haber sido el caso de Lucía Méndez, quien enfrentó la necesidad de recibir un implante dental como medida correctiva.
El padecimiento que habría llevado a Laucía Méndez a perder dientes
Hace algunos años, Lucía Méndez, icónica actriz mexicana que, pese a no aparentarlo, actualmente tiene 69 años de edad, habría enfrentado un delicado problema de salud que la llevó a someterse a una cirugía dental en un hospital privado en la Ciudad de México.
Pese a que ella nunca quiso hablar del tema, de acuerdo con fuentes cercanas, la artista tuvo que recibir un implante en el maxilar superior debido al desgaste severo del hueso que sostiene los dientes, una situación que habría derivado de esta enfermedad mandibular.
Este procedimiento fue necesario para colocar un implante en el maxilar superior, ya que la actriz sufría de un deterioro óseo que ponía en riesgo la estabilidad de sus dientes.
Según especialistas, este desgaste podría estar relacionado con la artrosis mandibular, una afección degenerativa que compromete las articulaciones temporomandibulares y que puede generar graves problemas dentales si no se trata adecuadamente.
¿Cómo se trata la artrosis mandibular?
El tratamiento de la artrosis mandibular depende de la gravedad de la enfermedad y puede incluir desde terapias conservadoras hasta intervenciones quirúrgicas. Algunas opciones son:
- Terapias físicas: Ejercicios para mejorar la movilidad y fortalecer los músculos de la mandíbula.
- Medicación: Analgésicos, antiinflamatorios y relajantes musculares para controlar el dolor y la inflamación.
- Férulas oclusales: Dispositivos que ayudan a reposicionar la mandíbula y reducir el desgaste.
- Cirugía: En casos severos, se pueden realizar procedimientos para reparar o reemplazar las articulaciones afectadas.
La gravedad de la artrosis mandibular
La artrosis mandibular es una enfermedad que puede pasar desapercibida en sus primeras etapas, pero que con el tiempo puede derivar en complicaciones graves como:
- Dolor crónico
- Pérdida de dientes
- Alteraciones en la mordida
- Dificultad para hablar y masticar
Por ello, es fundamental acudir a un especialista al primer signo de molestias en la mandíbula o los dientes, ya que un diagnóstico temprano puede prevenir el avance de la enfermedad.