No es secreto que Joy Huerta, de Jesse y Joy, está casada y tiene dos hermosos hijos junto a la mujer de su vida, Diana Atri, quien ha despertado la curiosidad de los fans luego de que Joy mencionara anécdotas con ella en una entrevista.
Su relación, pese a ser pública, es de bajo perfil, así que hasta hace poco solo había pocos detalles sobre la pareja, que lleva más de 10 años de relación estable en la que han aprendido a valorarse mutuamente.
La relación entre Diana Atri y Joy Huerta
La relación entre la cantautora mexicana y su ahora esposa, empezó como una simple amistad en la que, según palabras de la misma Joy, tenían una conexión inexplicable que las mantenía unidas más allá de lo que era una amistad común.
Ninguna habló de sus sentimientos inmediatamente, pero la relación nunca dejo de ser fuerte, la historia que narra Joy en entrevistas es que aunque tardaron en darse cuenta de que estaban enamoradas, no hubo momento en que no se lo demostraran mutuamente.
“Cuando me pasó no lo vi venir, voy a ser honesta, yo me enamoré de Diana y me tomó tiempo entender que yo estaba enamorada”, recordó Joy durante una entrevista.
Pronto ambas comenzaron a sentir una atracción especial por la otra hasta que su amor surgió fuerte y con el paso del tiempo fue inevitable llegar a una boda y a conformar una hermosa familia con dos hijos: Noah y Nour.
A qué se dedica Diana Atri
Ambas son discretas con su relación, sobre todo en redes sociales, donde aunque existen fotos donde aparecen juntas, hay pocos detalles de importancia sobre la relación y su día a día. El perfil de Diana empezó a tener actividad medianamente constante desde que su vida se ha enlazado a la de Joy.
Por eso son escasos los detalles, pero sabemos que Diana se describe como productora de arte After & Again, además de mantener una sociedad profesional con Joy, con quien tiene una marca de ropa, un podcast y varios emprendimientos.
Sin duda alguna este matrimonio es uno de los más creativos que puede existir, con una gran historia de amor por detrás que no deja de cautivar a todos los fas que no hacen más que admirarlas.