Carlos Trejo aseguró que pudo ponerse en contacto con Valentín Elizalde, luego de su fallecimiento, y que incluso su madre se mostró sorprendida de lo que logró, pues no podía creerlo.
El cazafantasmas es conocido debido a la pasión que siente por hablar de la comunicación que existe entre la vida y la muerte, pues asegura que ha sido testigo de cosas que no todos pueden percibir.
En esta ocasión acudió como invitado al programa ‘Terapia de Shock’, en el que se encontraban hablando de este tipo de casos y de la manera en la que en muchas ocasiones seres que han muerte se han manifestado a través de energías y sueños.
Por ello, quiso dar una explicación en lo que ocurre cuando esto es percibido por algunas personas, sobre todo cuando se trata de parientes cercanos a estos seres que continúan presentes de acuerdo a lo que menciona.
Fue así como recordó la ocasión en la que pudo hablar con el famoso cantante que fue asesinado de una manera bastante trágica y que hasta la fecha le sigue doliendo a sus seguidores.
“He tenido yo investigaciones de gente muy famosa, por ejemplo, de Valentín Elizalde”, expresó para empezar a contar la historia que vivió con uno de los familiares del cantante.
Comentó que al hacer la investigación tuvo que dormir a su primo, haciendo que de esta manera se pudiera comunicar con él a través del sueño, que él mismo provocó.
“Una de las pruebas que tuvimos para poder detectar que esto era real, (fue) que nos dijera en donde estaba la cadena de oro que había perdido y nos dijo ‘suban al buró, abran mi cajón, está ahí guardada’”, expresó.
La mamá de Valentín estaba sorprendida y no lo podía creer, por lo que fue a abrir el cajón del que habla y la encontró ahí guardada.
¿La comunicación con los muertos es posible?
De acuerdo a lo que Carlos Trejo menciona, sí lo es, sin embargo, destaca no es sano, pues se rompe con el proceso de tener que superar el hecho que ya ocurrió, por lo que se recomienda no hacerlo por salud de los vivos.
Esto no es algo que esté científicamente comprobado, por lo que se podría tratar solo de alguna coincidencia, o incluso una mentira; sin embargo, cada persona tiene sus propias creencias.