Cantinflas fue una de las figuras más emblemáticas del cine en México, el actor desde su debut llamó la atención por su peculiar forma de actuar y su personaje ganó popularidad entre el público de inmediato, esto le abrió las puertas para desempeñarse durante muchos años en la industria del cine, a lo largo de su carrera llegó a filmar más de 50 películas, por ello es que sus fans no lo olvidan a pesar de haber fallecido hace ya 27 años, el actor siempre se destacó y su carrera ha inspirado muchos a seguir sus pasos en la industria del espectáculo.
Aunque el actor fue muy conocido por sus exitosas cintas, en realidad era relativamente poco lo que se sabía sobre su vida personal, si bien gozaba de gran fama, era muy discreto en lo que respecta a sus relaciones e incluso su vida familiar, se sabe que el actor se casó y tuvo una romance de toda la vida con Valentina Ivanova Zuvareff, una actriz de origen ruso en ti con quien decidió adoptar un hijo, Mario Arturo Moreno Ivanova, quien tuvo una vida muy conflictiva.
Desafortunadamente y a pesar de ser el gran amor de su vida, la muerte se interpuso entre ellos cuándo Valentina falleció de cáncer óseo, desde entonces, el actor no volvió a casarse y cuidó de su hijo quien apenas tenía cinco años cuando perdió su madre, razón por la cual comenzó a tener serios problemas emocionales y conflictos con el actor y tiempo después el actor también perdió la vida en 1993 a la edad de 81 años esta causa de cáncer de pulmón, siendo su único heredero Arturo Moreno.
Aunque su hijo quien fue adoptado nunca incursionó en la industria del entretenimiento, fue conocido por acercarse con frecuencia a la prensa cuando se trataba de algún asunto relacionado con su padre, desafortunadamente él perdió la vida de forma prematura, a los 57 años de edad tras un paro cardíaco, dejando atrás solamente dos hijos, siendo el más conocido es Mario Moreno Bernat, pero también se sabe de la existencia de Marisa Moreno, una joven que ha tenido que pasar por duros momentos a lo largo de los años debido a su complicada situación familiar.
En sus peores momentos la joven tuvo problemas con las adicciones a las drogas y tuvo que pasar incluso por rehabilitación para poder volver a tomar el control de su vida, además estuvo casada con un hombre llamado Alain Meder quien la maltrato y abuso de ella hasta el grado de dejarla hospitalizada, él sólo recibió una sentencia de un año sentí, a partir de este momento la joven se ha dedicado a vivir su vida muy cerca de Dios, ya que es una joven religiosa y en Instagram con frecuencia presume este gran cambio que ha dado a su vida.