El reciente sismo de magnitud 4.8 que sacudió a Nueva York ha dejado a sus habitantes, incluida la reconocida actriz Angélica Rivera, en estado de sorpresa y nerviosismo.
Este inusual evento telúrico, catalogado como uno de los más graves en años según expertos, tomó por sorpresa a los residentes de la Gran Manzana, incluyendo a la familia de la ex primera dama mexicana, quien se encontraba en la ciudad para acompañar a su hija Sofía Castro en la elección de su vestido de novia.
El sismo afectó la costa este de Estados Unidos desde Maryland hasta Maine, con epicentro en Nueva Jersey, causando daños en algunas infraestructuras y llevando a la suspensión de actividades en varias ciudades, incluyendo Nueva York, Nueva Jersey, Filadelfia y Connecticut. Según el Centro Nacional de Información Sísmica, este evento se suma a una larga lista de alrededor de 2000 sismos reportados en la región desde 1700, con solo 13 clasificados como alarmantes.
Así fue como Angélica Rivera vivió el sismo en Nueva York
La experiencia del sismo fue vivida de manera diferente por Angélica Rivera y sus hijas. Mientras que la hija de la actriz entrevistaba a sus acompañantes para compartir impresiones, Rivera expresó su profundo temor hacia los sismos, destacando que nunca antes había vivido algo similar en Nueva York.
"Me dan muchísimo miedo los sismos, jamás me había tocado presenciar algo similar en Nueva York. Cuando se activaron las alarmas en los celulares me asusté demasiado, quería salir corriendo. Creo que esto que está pasando tiene mucho que ver con el eclipse", mencionó la también ‘ex Primera Dama’
Por otro lado, Sofía Castro, la hija de Angélica Rivera, resaltó la importancia de no subestimar el fenómeno, considerándolo como una señal para cuidar el planeta. Aunque no sintió directamente el temblor, expresó su nerviosismo y prestó atención a las medidas de seguridad.
"A mí me dan mucho miedo los temblores, no lo sentí, si lo hubiera sentido hubiera salido disparada, pero como aquí en Nueva York no tiembla he estado muy tranquila, ahora ya estoy muy nerviosa, porque empezaron a sonar todas las alarmas de los celulares", mencionó.
Este acontecimiento ha generado un debate sobre la preparación para eventos sísmicos en regiones no tradicionalmente asociadas con la actividad sísmica, así como una reflexión sobre la importancia de estar alerta y preparado ante cualquier eventualidad.
