Alan Tacher, el famoso conductor, acudió a la entrevista con Yordi Rosado para hablar de sus proyectos profesionales, pero también de cosas muy personales, como sus hijos, parejas y sus padres, a quienes recuerda con mucho cariño y confesó que a varios años de la muerte de su papá sigue escuchando el último audio que le envió.
En la entrevista con Yordi Rosado aseguró que su madre era una mujer muy seria, que casi nunca expresaba sus sentimientos, todo lo contrario a su padre, quien desbordaba amor cada vez que podía; sin embargo, también tenía una faceta violenta debido a la forma en la que fue educado.
“Mi papá nos daba unas madrizas, pero madrizas y lo dije hace muchos años, fue un shock, a mí no se me hizo un shock, agarra el cinturón... a mi papá, mi abuelo le pegaba, pero que yo sepa era más cabr*n, con ganchos de madera, le pegaba en las plantas de los pies, a todos sus hijos, mi abuelo tuvo 12 hijos, mi abuelo les ponía unas de aquellas, mi papá agarró esa onda y mi hermano y yo sufrimos más ese tema”, confesó.
Alan Tacher confesó que sus nanas se metieron en varias ocasiones para evitar que le pegaran a él, pero uno de los momentos más difíciles fue cuando estuvo a punto de pelearse a golpes con él por defender a su mamá.
“Yo lo juzgaba mucho, a mi papá, estuve a punto, nunca lo he dicho, pero por defender a mi mamá, nunca le pegó a mi mamá, pero por defender a mi mamá en una discusión me iba a pelear a golpes con mi papá, hubo una separación de muchos años, cuando se fue de la casa lo juzgaba mucho, nunca se me va a olvidar que me dijo: ‘Cuando crezcas, te cases y tengas hijos te vas a dar cuenta de que es diferente ser mal padre que ser mal esposo’, él fue mal esposo, pero el mejor padre”, dijo.
Tacher dijo que tuvo una plática muy larga con su papá años después, lograron sanar todas las heridas y se hicieron inseparables, pues no hubo un solo día en el que su padre le habló por teléfono para preguntar sobre su día.
“Fue el wey más increíble del mundo, los últimos 20 años, mi papá era de los que te hablaba todos los días, todos y ya sabes cómo somos los chavos: ‘Papá, ya no me hables’ (…) cuando empezó a enfermarse y me dejó de hablar, supe que había algo mal, me hablaba todos los días estuviera en donde estuviera, extraño que me hable por teléfono (…) podría tener 25 mil cinturonazos más y pediría que estuviera a mi lado”, dijo entre lágrimas.
Alan Tacher confesó que aunque han pasado varios años desde la muerte de su papá, no piensa borrar su contacto del teléfono y hasta hoy en día repite el último audio que él le envió.
“Tengo su contacto, el teléfono de mi papá, tengo un mensaje de voz que me mandó, lo sigo escuchando, los últimos años con mi papá fueron extraordinarios”, insistió.
